Dentro de YPF Galuccio fue designado responsable de la operación y desarrollo de los yacimientos de la región Sur, cuando la empresa perforaba 600 pozos por año y alcanzaba un récord de utilidades.

Cuando YPF compró Maxus Energy -petrolera estadounidense en quiebra- Galuccio es convocado, por su capacidad de gestión y liderazgo, para integrar el reducido grupo de gerentes que llevarían adelante la transformación de la compañía, nueva división internacional de YPF.

En apenas un año, la empresa, que contaba con 2.300 empleados en cinco países, pasó de tener una deuda de más de 1.000 millones de dólares, a un superávit de 10 millones.

En 1998 se hace responsable de una importante operación de yacimientos que YPF Internacional tenía en Indonesia. Al frente de un equipo multidisciplinario de geocientíficos, ingenieros y operadores, logra aumentar la producción y el desarrollo económico de activos marginales a través de la aplicación de nuevas tecnologías.

Al año siguiente, y a los pocos meses de que Repsol comprara YPF, decide buscar nuevos horizontes por no coincidir con el modelo del nuevo management.

Así Schlumberger, el grupo líder en el mundo de servicios petroleros, lo contrata apenas queda disponible y lo designa Gerente General para México y América Central.

Galuccio multiplicó el tamaño de la compañía y la convirtió en el principal socio estratégico y tecnológico de Pemex, la empresa nacional de petróleo de México.

En 2005 fue nombrado Presidente de IPM (Integrated Project Management), la división de gerenciamiento de proyectos de Schlumberger, que hoy es líder de la industria en aplicación de tecnología y gerenciamiento de proyectos integrados en el mundo. Y fue el responsable de su expansión geográfica y posicionamiento.

En el 2011 creó y condujo, hasta ahora, la división “Schlumberger Production Management”, con sede en Londres, creando una innovadora modalidad de negocio en el ámbito petrolero mundial.

Fuente: Telam